Test de producto – Caballete central Emobex ECM
Creo que es algo general que, cuando te gusta algo y quieres comprarlo, mires las pruebas de producto que hoy en día corren por internet. Sean en vídeo, texto, como sea. Pero también creo que dichas pruebas se basan en la mayoría de casos en pruebas puntuales y muy cortas en el tiempo, por lo que al final lo que acabas teniendo es una descripción ampliada del producto.
En este caso lo que vas a ver es un test de producto que ha durado algo más de dos años. Verás sus pros y contras desde un punto de vista totalmente de usuario.
El objeto del test es un caballete central fabricado por los Granadinos de Emobex, al que ellos llaman ECM.
La peculiaridad de este caballete es que levanta la moto por completo apoyándose en el chasis, como los caballetes de las carreras de resistencia de 24 horas. Además viene equipado con ruedas por lo que, se encuentre en el estado que se encuentre tu moto, siempre podrás moverla (y quitarla de en medio).
Ya te adelanto que el resultado del test es muy positivo, aunque existen algunos contras que siempre debes tener en cuenta. He dividido el test en dos partes, una sobre el uso del caballete en casa y otra sobre el uso del mismo en circuito. Vamos a por ello!
EL Caballete
Y digo EL en mayúscula porque creo que es la mejor manera de definirlo. Aunque viene desmontado (imprescindible para el envío) su montaje es bastante simple. Te lo sirven con una pletina de anclaje específica para tu moto, por lo que el caballete en si es universal pero la pletina de anclaje es específica (si necesitases usarlo en varias motos necesitarás una pletina de montaje para cada modelo).
Una vez montado necesitarás regular la inclinación de la moto sobre el caballete con tal de que ambas ruedas queden en el aire. El ajuste es bastante sencillo pero algo tedioso de hacer. Su regulación se hace a través de una especie de tensor (varilla roscada con contratuerca) y una vez lo tengas hecho no necesitarás hacerlo nunca más.
Para adaptarlo a la moto desde Emobex te sirven además un casquillo. Este casquillo debe montarse y quedarse permanentemente montado en la moto. Habitualmente se debe desmontar una de las tuercas de los ejes que sujetan el motor al chasis, aunque depende del modelo. En nuestro caso era así. Dicho casquillo tiene una forma externa hexagonal para que puedas apretarlo con una llave al par de apriete específico de la tuerca original. Esto es muy importante para evitar que las vibraciones del motor se traspasen al chasis (y para que no se te caiga el casquillo en marcha, claro).
Una vez todo ajustado ya se puede levantar la moto. El caballete consta de una palanca elevadora con la que levantas doscientos y pico kilos sin despeinarte. Debes tener en cuenta, sobretodo al principio, que si inclinas la moto un poco hacia ti (contando que te hayas puesta en el lado izquierdo de la moto para poner el caballete) te será más fácil encajarlo en la moto.
EN CASA
La vida en casa con el ECM mejora sustancialmente. Es más, a los 5 minutos te preguntas por qué no compraste uno antes. Puedes hacer cualquier trabajo sobre ruedas, suspensiones, dirección… sin necesidad de instalar caballetes de tija, burriquetas, alguna tochana que otra y con la ventaja de que puedes dejar el trabajo a medias y colocar la moto en cualquier sitio gracias a las ruedas del caballete.
En este caso, por ejemplo, si necesitas enviar tu amortiguador trasero a reparar/revisar, puedes desmontarlo y enviarlo y mientras tanto puedes dejar tu moto guardada en un rincón. También sabemos de alguno que lo utiliza para meter la moto en un trastero (si la moto pasa por la puerta, generalmente el caballete también).
Mover la moto subida en el caballete es muy muy sencillo, las ruedas disponen de freno por si necesitas subir la moto a un elevador o la dejas en un suelo inclinado. También se le puede dar la vuelta a la moto completa en muy poco espacio y resulta especialmente útil sin necesitas moverla o girarla en un sitio estrecho.
Cuando no lo tengas instalado en la moto el caballete puede guardarse sin muchos agobios bajo cualquier mesa o estantería, a nosotros nunca nos ha molestado.
EN EL CIRCUITO
No creo que este sea el uso al que destinaron el caballete, pero casi siempre me lo he llevado a los circuitos. Digo casi siempre porque en circuitos como Alcarràs el suelo de los boxes es de cemento sin alisar, por lo que las ruedas no corren bien y resulta bastante molesto utilizar el caballete sobre este suelo. En el resto de circuitos, que tienen suelo de cemento alisado, funciona tan bien como en casa.
El transporte del mismo tampoco reviste mucho problema en una furgoneta aunque si llevas un remolque con guías quizá debas desmontar las patas para meterlo en el maletero del coche. También es algo pesado, aunque se da por hecho debido a la rigidez que debe tener para soportar el peso de una moto.
No hay nada como subir tu moto a un ECM en un pit lane, serás la envidia de todos independientemente de la moto que subas encima del caballete. Es llegar, subir, empujarla, darle la vuelta… Puedes montar los calentadores en las ruedas y seguir moviendo la moto si necesitases moverla (de lo contrario deberías quitarlos, bajar la moto de los caballetes tradicionales, moverla, volver a colocar los caballetes y volver a colocar los calentadores).
El único “pero” que nos hemos encontrado en el uso en circuito es que, estando la moto caliente, cuesta algo más encajar el caballete en el casquillo roscado al chasis. Entendemos que es por un tema de dilatación del casquillo, aunque tampoco es algo especialmente grave.
CONCLUSIONES
Es un muy buen producto diseñado y fabricado en España. Vale cada euro que cuesta (250€ aprox. Octubre 2017) y te puedo asegurar que una vez lo tengas no podrás vivir sin él!!
Puedes encontrarlo en la web de Talleres Mobex (www.emobex.com) y puedes hacer la compra directa on-line. Échale un vistazo, te sorprenderá!